Discriminación a modelo y la sombra del pasado

Increíble que en una sociedad moderna que viven en el siglo XXI y donde los mitos sociales y tabúes deberían ya quedar en el olvido, los medios impresos hayan actuado de manera vergonzosa sin una pizca de deontología profesional, teniendo como contexto el certamen de belleza... donde Melissa Paredes fuera coronada reina y por una foto, que forma prácticamente parte de su pasado, la señorita ganadora, más por su carisma que por su físico, haya sido discriminada públicamente. Esto debe ser considerado ofensa hacia la dignidad de la mujer, pues nadie puede negar que todos tenemos un pasado.

@anggelusnero

Aún cuesta creer que vivimos en una sociedad que todavía goza de humillar con críticas y rumores. Qué aun cuando las personas afectadas por gente de malas intenciones expliquen con razonamientos justos y verdaderos las circunstancias que están dañando su imagen, la mayoría de la audiencia en general solo gusta de pensamientos malintencionados y de juegos sucios a fin de desmoralizar a quien con mucho esfuerzo ha llegado a su meta.

Este es el caso de Melissa Paredes, joven y atractiva señorita que se ganó el reinado en uno de los certámenes de belleza más importantes, sin embargo, por una foto publicada, a mí opinión por alguien que padece de algún trastorno de personalidad y que no se valora a sí mismo, tuvo que enfrentarse casi al segundo a una tormentosa lluvia de críticas hacia su integridad moral. Hasta donde los medios impresos dieron a conocer, la señorita salía en la foto vestida de conejita muy provocadora que a pesar de su declaración, donde dijo que la foto publicada es de hace ya 3 años, no pudo recuperar su imagen ya que la diseminación del periodismo local "burdo y sin deontología profesional" actúa sobre las bases de un público que todavía vive la época de Cristobal Colón.

La Academia Española define Discriminación como acción de discriminar, que lo conceptualiza en dar trato de inferioridad a una persona o colectividad por motivos raciales, religiosos, políticos, morales, sociales, etc. No se trata únicamente de una señorita que habiendo ganado la corona de Miss Perú Mundo 2013 haya sido vituperada por medios impresos y la mayor masa de público, que tuvo que abandonar la corona y sus sueños solo porque estar bien consigo mismo y el amor por su familia, sino que también se trata de que buscando la igualdad de género y el respecto y protección contra el maltrato físico y psicológico de la mujer, tengamos que caer en una forma muy estúpida de maltrato psicológico, pues la forma como se hizo público aquella foto dejó un sentido de "humillación" hacia su persona, algo que no es posible que se pueda tolerar todavía en nuestra sociedad que busca mejorar cada día. ¿De quién es la culpa? ¿De la mayor masa de público que sigue el certamen o del voraz deseo de los medios impresos de vender?

La Sombra del Pasado.

Todos tenemos un pasado, un talón de aquiles (digámoslo así) por el cual cojeamos. En algún momento de nuestras vidas tuvimos una desoportuna y desigual lucha con el destino, que nos ha llevado por necesidad o por obligación a realizar acciones que no quisimos realmente hacer. Hacemos lo que no nos gusta, porque las opciones no son las mismas para todos, o por que a veces tuvimos que sacrificar una partecita de nuestra alma para conservar toda nuestra vida. Todos, nadie puede decir que NO.

Esto no quiere decir que la justamente coronada Miss Melissa Paredes haya pasado por eso. Lo que quiero decir es que si se puede juzgar a una persona por la moral de una sociedad que ya no vive la época de Cristobal Colón, entonces quiere decir que somos una sociedad hipócrita que aún no evoluciona en nada, que cuando se vea vulnerado el honor de alguna persona, fuera quien fuera, como vuitres carroñeros estaremos al acechos, que incluso hasta el Condor es un poco más dscente a la hora de buscar su alimento. ¿Qué carajos tiene que ver esto?

Pues en que la deontología profesional de los medios de comunicación impresos está minado y deteriorado tanto al nivel de un ave carronera, donde no existen ni la prudencia ni el respeto por la dignidad de la persona que norma concienzudamente el código civil peruano. La señorita podría denunciar y con justo hecho. Tengamos en cuenta que la mente del consumir peruano de noticias es como la de un niño todavía: la población vive repitiendo al pie de la letra los datos emitidos, sin evaluarse conscientemente, sin tomar en cuanta la necesidad de recriminar más lo que nos transmiten que dictar críticas y rumores ante también una ciudadana, sin tomar en cuenta que actos pudiera cometido en el pasado y hay medios que tienen un pasado tan bonito con la corrupción vivida en épocas de Fujimori.

Debemos mirar hacia el presente y hacia el futuro, por un cambio de pensamiento en la mente de todos los consumidores de material televisivo o impreso. Una sociedad sin violencia, maltrato psicológico o discriminación de ningún tipo. Tenemos un pasado, pero eso no significa que debamos ser humillados o reprochados por eso, y más aún si hemos abandonado voluntariamente ese pasado. Que no vuelva a repetirse aptitudes como está en el colectivo nacional sería una buena bandera, solo que para lograrlo debe partir de quienes dominan la mente de ese colectivo.

Aprender a querernos a nosotros mismos es una bahía. Aprender a querer a los demás por sus capacidades o talentos y olvidarnos lo negativo de su pasado es un puerto al que es difícil de llegar.

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