Reflexión 13: La Nobleza del Amor
El amor… no se irrita, no guarda
rencor. I corintios 13:5.
Sed benignos unos con otros,
misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a
vosotros en Cristo. Efesios 4:32.
La
Nobleza del Amor
Una palabra ofensiva, el amor propio herido son temas que se machacan;
hablamos fácilmente de ello a otros. Al final, no aguantamos más y explotamos
diciendo palabras duras y descontroladas que producen terribles estragos. Pero
el verdadero amor no se irrita y nos protege de tales reacciones. La única
indignación justificada es cuando vemos a un desdichado maltratado o cuando se
contradice la palabra de Dios. La indignación según Dios nunca resulta algo que
sea hecho contra nosotros. Cuando Jesús limpió el templo estaba indignado a
causa de la profanación de la casa de su Padre (Mateo 21:12), pero cuando fue
atacado o humillado, jamás se enojó ni se defendió.
El amor no hace cuentas porque no da lugar al resentimiento ni al
rencor. Si Dios borró nuestros numerosos pecados, si no nos inculpa de nuestras
faltas (Romanos 4:8) ¡Con cuánta más razón debemos perdonar y olvidar el mal
que se nos ha hecho! Perdonar es no tener cuenta de ellos. ¡Qué liberación!
El amor no guarda rencor. En contabilidad es obligatorio escribir todo
lo que se me debe (y lo que debo), pero en mis relaciones personales recordar
todo lo que fue hecho contra mí es el camino que me conduce a la amargura.
“No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal” (Romanos
12:21).
También Puedes Revisar:
Fuentes Bibliográficas.
“La
Buena Semilla”, meditaciones cotidianas de la Biblia para el año 2010. © Ediciones Bíblicas “La Buena Semilla” 1166
Perroy (Suiza).Publicaciones Diarias en horario de 09:00 a.m.y de 4:00 p.m. (Zona horaria UTC or GMT -05:00) ¡¡¡Gracias por tu Visita y No olvides regresar!!!
Comentarios
Publicar un comentario
Gracias por tu comentario, lo publicaremos en breve.